Un espacio para reconstruir con sentido

Algunas de las razones más comunes incluyen:
* Problemas de salud mental:
   – Depresión y ansiedad (son dos de los motivos más frecuentes).
   – Trastornos de la alimentación.
   – Trastornos del sueño.
   – Trastorno obsesivo-compulsivo (TOC).
   – Trastorno de estrés postraumático (TEPT).
* Dificultades emocionales:
   – Problemas de autoestima.
   – Manejo del estrés.
   – Duelos y pérdidas.
   – Problemas de ira.
* Problemas de relaciones:
   – Conflictos familiares.
   – Dificultades en la pareja.
   – Problemas de comunicación.
* Crecimiento personal:
   – Autoconocimiento.
   – Desarrollo de habilidades de afrontamiento.
   – Mejora de la calidad de vida.
* Situaciones de crisis:
   – Traumas.
   – Cambios importantes en la vida.
   – Problemas laborales.

En resumen, la terapia psicológica puede ser beneficiosa para cualquier persona que esté experimentando dificultades emocionales, mentales o relacionales, o que simplemente desee mejorar su bienestar general.

Hablemos… estamos acá para vos!
Contame…. te acompaño, no estás solo/a.

Podés buscar ayuda psicológica si sentís malestar, sufrimiento, o si tus síntomas te impiden vivir como quisieras. También podés considerar buscar ayuda si tus problemas afectan a las personas que te rodean.

Señales que pueden indicar que necesitas ayuda psicológica:
Ansiedad, depresión, estrés.
Problemas para dormir.
Cambios de humor repentinos.
Dificultad para controlar emociones como la ira.
Falta de apetito.
Pensamientos o comportamientos suicidas.
Dolor de cabeza, fatiga, o problemas digestivos.
Sentirte emocionalmente abrumado.
Sentirte confuso y no saber por qué.

¿Cuándo buscar ayuda psicológica?
Si los días malos son algo recurrente en tu vida.
Si sientes que el malestar es la regla y no la excepción de tu día a día.
Si lo que sientes, piensas o haces te está generando un gran malestar y sufrimiento.
Si te sientes desbordado por la situación.

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La terapia matrimonial y familiar es un tipo de psicoterapia que se enfoca en las relaciones y comportamientos de los miembros de una familia. Su objetivo es mejorar la comunicación y la unidad familiar.

¿Qué trata?
Conflictos de pareja, como separación o divorcio.
Conflictos entre padres e hijos.
Abuso de sustancias.
Disfunción sexual.
Dificultades financieras.
Duelo.
Trastornos alimentarios.
Problemas de conducta en niños.
Transiciones vitales, como pérdida de empleo.
Dificultades para cuidar a personas mayores.

¿Cómo funciona?
Examina cómo el comportamiento de un individuo afecta a su relación y a la familia.
Ayuda a los miembros de la familia a comprender cómo su estado psicológico afecta a los demás.
Ayuda a mejorar la comunicación para afrontar conflictos.
Ayuda a restablecer una correcta expresión de emociones.

¿Quién la realiza?
Un terapeuta matrimonial y familiar (TMF) que está capacitado para comprender relaciones complejas.

¿Dónde se puede encontrar?
Aquí, en Centro Bautista.

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La duración de una terapia psicológica puede variar desde unas pocas semanas hasta varios años. Esto depende de varios factores, como la situación del paciente, el tipo de terapia y la evolución del paciente.

Duración según el tipo de terapia:
Terapia individual para ansiedad: entre 8 y 15 sesiones.
Terapia para depresión: puede durar 6 meses o un año.
Terapia de pareja o familiar: puede durar desde unas pocas sesiones hasta varios meses o años.
Terapia grupal: puede durar 90 minutos.

Otros factores que influyen:
La eficacia del tratamiento.
Las habilidades adaptativas del paciente.
Las herramientas personales del paciente.
La complejidad de los problemas.
La disposición de todos los miembros de la familia para trabajar juntos en la terapia.

Duración de las sesiones:
Las sesiones individuales suelen durar de 45 a 60 minutos.
Las sesiones de terapia de pareja o familiar pueden durar hasta 90 minutos.
Las sesiones con niños suelen ser más cortas, alrededor de 30 minutos.

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